Dibujando el camino hacia la Década Digital

  • SOCIEDAD DIGITAL

La Brújula Digital para 2030: la Vía Europea de la Década Digital, es una estrategia de la Comisión Europea dirigida a conseguir una transformación digital exitosa, basada en el empoderamiento de los ciudadanos y el liderazgo tecnológico, con el objetivo de que siembre las bases de una sociedad más resiliente y próspera.

La Unión Europea quiere avanzar en la digitalización de la sociedad y la economía, y, para ello, la Comisión Europea presentaba el pasado mes de marzo la Brújula Digital 2030, una hoja de ruta para el desarrollo de los objetivos digitales de nuestro continente con especial interés en la capacitación de las personas, el desarrollo de las infraestructuras necesarias, la transformación de los negocios y el despliegue de unos servicios públicos plenamente digitales.

En palabras de la Presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, “Europa tiene una oportunidad única de reconstruirse mejor. Mediante el nuevo presupuesto plurianual y el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, hemos movilizado recursos sin precedentes para invertir en la transición digital. La pandemia ha puesto de manifiesto hasta qué punto las tecnologías y capacidades digitales son cruciales para trabajar, estudiar y mantenerse en contacto, y qué aspectos deberíamos mejorar. Ahora debemos hacer de esta la Década Digital de Europa para que todos los ciudadanos y empresas puedan acceder a lo mejor que pueda ofrecer el mundo digital. La Brújula Digital de hoy nos ofrece una visión clara de la manera de conseguirlo”.

 

Población con capacidades digitales

Europa necesita ciudadanos con capacidades digitales, una mano de obra cualificada digitalmente y muchos más expertos en estas tecnologías que en la actualidad. Las competencias digitales básicas para todos los ciudadanos y la oportunidad de adquirir competencias especializadas en tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para la mano de obra son un requisito previo para participar activamente en la Década Digital. Por tanto, cuando la Comisión Europea habla en su estrategia de ciudadanos con capacidades digitales y profesionales del sector digital altamente cualificados, lo que quiere conseguir es que de cara al año 2030, no menos del 80 % de los ciudadanos adultos tengan competencias digitales básicas y que, por lo menos se cuente con veinte millones de especialistas en TIC en los países de la Unión, incrementando, de forma paralela, el porcentaje de mujeres en este tipo de perfiles y puestos de trabajo.

Infraestructuras digitales seguras, eficaces y sostenibles

La Comisión estima que Europa sólo alcanzará el liderazgo digital si se basa en infraestructuras digitales sostenibles, seguras y eficaces para la conectividad, la microelectrónica y el procesamiento de datos. Una base sólida para la tecnología digital permitirá la innovación y apoyará la ventaja competitiva de la industria europea. Es necesario realizar importantes inversiones en todos estos ámbitos que requieren una coordinación para alcanzar la escala europea.

Todo esto se traduce en que para finales de la década, todos los hogares de la UE han de tener conectividad de Gigabit y que la cobertura de las redes 5G deba alcanzar todas las zonas pobladas, además de asegurar que la producción de semiconductores punteros y sostenibles en Europa debería representar una quinta parte de la producción mundial, el despliegue en la Unión de 10.000 nodos externos seguros y climáticamente neutros, y que Europa debería tener su primer ordenador cuántico.

 

Transformación digital de las empresas

Para los miembros de la Comisión Europea, la verdadera Transformación Digital de las empresas dependerá de su capacidad para adoptar las nuevas tecnologías con rapidez y de forma generalizada, incluso en los ecosistemas industriales y de servicios que hasta la fecha se encuentran más retrasados en su avance. Esto permitirá un uso más eficiente de los recursos, impulsará la productividad de los materiales y reducirá la vulnerabilidad a las crisis de suministro. La PYME desempeña un papel fundamental en este proceso, no sólo porque representan el grueso de las empresas de la Unión, sino también porque son una fuente crítica de innovación. Para la Comisión, un mercado único que funcione de verdad debería crear condiciones favorables para la asimilación digital, la innovación disruptiva, el crecimiento rápido y la ampliación.

La Comisión Europea ha propuesto en su Brújula Digital 2030 los pasos necesarios para hacer realidad los objetivos digitales de la Unión Europea al final de esta década

Para alcanzar esta meta, la Comisión Europea espera que en el año 2030 el 75% de las empresas estén utilizando servicios de computación en nube, macrodatos e Inteligencia Artificial, así como que nueve de cada diez pequeñas y medianas empresas cuentan con lo que denominan como nivel básico de intensidad digital, así como que el número de unicornios de la UE debería multiplicarse por dos.

 

Digitalización de los servicios públicos

Desde la perspectiva de la Comisión, Europa debe aprovechar la digitalización para impulsar un cambio de paradigma en la forma en que los ciudadanos y las empresas interactúan con las Administraciones Públicas y las instituciones democráticas. Los servicios públicos deben ser totalmente accesibles en línea, incluso para las personas con discapacidad, y beneficiarse de herramientas fáciles de usar con altos estándares de seguridad y privacidad. El gobierno como plataforma, como una nueva forma holística de construir servicios públicos digitales, debe garantizar la interoperabilidad en todos los niveles de la administración.

Así, con este punto se quiere conseguir que, para 2030, todos los servicios públicos clave sean accesibles en línea, que los ciudadanos puedan tener acceso a su historial médico electrónico y que el 80% de estos ciudadanos ya estén utilizando una solución de identificación electrónica.

Pilares digitales para la Europa de 2030

La estrategia de digitalización europea se apoya en tres pilares básicos como garantía de que los países miembros de la Unión Europea van a aprovechar la oportunidad otorgando a los ciudadanos, las empresas y las Administraciones Públicas el control de la Transformación Digital. El primero de estos pilares básicos es poner la tecnología al servicio de las personas, para lo que las autoridades de la Unión invertirán en competencias digitales para todos los ciudadanos y para los trabajadores del sector TIC, protegerán a las personas contra las amenazas cibernéticas, garantizarán que la IA se desarrollará de manera respetuosa con los derechos de las personas y sea confiable, acelerará el despliegue de la banda ancha ultrarrápida para hogares, escuelas y hospitales, y ampliará la capacidad de supercomputación de Europa para desarrollar soluciones innovadoras en Sanidad, Transportes y Medio Ambiente. El segundo de estos elementos básicos apunta a lo que denominan una economía digital justa y competitiva que, en opinión de los reguladores y legisladores europeos, posibilitará el acceso a la financiación y la expansión de una comunidad dinámica de empresas emergentes y pequeñas empresas innovadoras y de rápido crecimiento, reforzará la responsabilidad de las plataformas online al proponer una Ley de servicios digitales, clarificará las normas sobre servicios on-line, garantizará que las normas sean adecuadas para la economía digital, velará por unas condiciones justas de competencia y mejorará el acceso a datos de alta calidad al tiempo que se garantiza la protección de los datos personales y sensibles. Por último, la UE persigue una sociedad abierta, democrática y sostenible, o, lo que es lo mismo, que emplee la tecnología para ayudar a la Unión a ser climáticamente neutra antes de 2050, que reduzca las emisiones de carbono del sector digital, que dé a los ciudadanos mayor control y protección de sus datos, que cree un espacio europeo de datos de salud que favorezca la investigación, el diagnóstico y el tratamiento específicos, y que luche contra la desinformación online y fomente la diversidad y fiabilidad de los contenidos en los medios de comunicación.

 

Potentes inversiones para avanzar en la Década Digital

Para hacer realidad la Década Digital, la Comisión Europea ha hecho propias tres iniciativas del programa Europa Digital, definido para reforzar la soberanía tecnológica europea y aportar soluciones digitales al mercado, que contarán con una financiación de 1.980 millones de euros.

La primera, dotada con 1.380 millones de euros, se centrará en Inteligencia Artificial, la nube y los espacios de datos, la infraestructura de comunicación cuántica, las competencias digitales avanzadas y el amplio uso de las tecnologías digitales en toda la economía y la sociedad, hasta finales de 2022. La segunda de las iniciativas se centra en el ámbito de la ciberseguridad, con un presupuesto de 269 millones de euros hasta finales de 2022, y la tercera, en la creación y explotación de la red de centros europeos de innovación digital, con un presupuesto de 329 millones de euros hasta finales de 2023.

Para Margrethe Vestager, Vicepresidenta Ejecutiva responsable de Una Europa Adaptada a la Era Digital, “con el programa Europa Digital creamos infraestructuras digitales seguras y sostenibles. También facilitamos a las empresas tener un mejor acceso a los datos o utilizar soluciones impulsadas por la IA. El programa también invierte para velar por que los europeos puedan tener las capacidades necesarias para participar de forma activa en el mercado laboral. Se trata de que todos en Europa puedan beneficiarse de soluciones tecnológicas adaptadas al mercado”. 

 

Primeros pasos de la Comisión

Para ir avanzando para la consecución de estos ambiciosos objetivos, la Comisión Europea va a facilitar la creación de proyectos plurinacionales que combinen inversiones con cargo al presupuesto de la UE, los estados miembros y la industria, y aprovechen el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia y otros fondos de la UE. Entre estos destaca la creación de una infraestructura paneuropea interconectada de tratamiento de datos; el diseño y despliegue de la próxima generación de procesadores fiables de baja potencia; y administraciones públicas conectadas. Por otra parte, y con el objetivo de asegurar que los valores y derechos de la Unión Europea se mantienen inalterables en el espacio digital, la Comisión Europea ha propuesto la definición de un marco de principios digitales como, por ejemplo, el acceso universal a una conectividad de alta calidad, a suficientes competencias digitales, a servicios públicos y a servicios en línea equitativos y no discriminatorios. Según el comisario de Mercado Interior, Thierry Breton, “Europa tiene que velar por que sus ciudadanos y empresas tengan acceso a un surtido de tecnologías punteras que mejoren su vida y sean más seguras e incluso más ecológicas, siempre que también tengan las capacidades necesarias para utilizarlas. En el mundo posterior a la pandemia, es así como configuraremos juntos una Europa resiliente y digitalmente soberana. Ésta es la Década Digital de Europa”.