Las alertas de la gota fría resaltan la necesidad de monitorizar las emergencias en los ayuntamientos
- SOCIEDAD DIGITAL
La falta de personal cualificado y de herramientas digitales deja a muchos ayuntamientos sin posibilidad de prever situaciones de crisis. La monitorización que utilizan las grandes empresas analiza datos en tiempo real y permite anticipar crisis. “Hay que adoptar sistemas más eficientes y coordinados”, señalan desde el sector TIC.
La catástrofe humanitaria que ha asolado varios municipios de la Comunitat Valenciana con la gota fría ha puesto en el centro de la crítica los sistemas que se utilizan para comunicar alertas a las administraciones, especialmente en lo que respecta a alertas de emergencia. Según destacan los expertos, “hay muchos Ayuntamientos pequeños que apenas cuentan con un informático y en situaciones así no tienen capacidad para gestionar”.
Durante esta última semana como en las próximas se analizarán los sistemas que se emplean en la actualidad, así como los protocolos y mecanismos que hay instaurados para hacer frente a situaciones de este calibre. El foco se pone en varios apartados: desde la implementación de sistemas de alerta temprana hasta la monitorización de datos que generen mayor facilidad a la hora de reaccionar.
La crítica por la falta de sistemas de alerta temprana surge de la velocidad a la que se han emitido las alertas a la población, donde la falta de avisos previos evitó una mayor preparación. “Hay que adoptar sistemas de alerta masiva más eficientes y coordinados”, explica Sancho Lerena, CEO de la tecnológica española Pandora FMS, especializada en seguridad y gestión IT.
Sin embargo, no lo único que debe mejorarse de cara a futuras crisis de este tipo. También destacan la necesidad de potenciar la comunicación interadministrativa, evitando la descoordinación entre los diferentes niveles de gobierno y cuerpos de emergencia. “Hoy en día ya se cuenta con herramientas que facilitan este intercambio de datos y que aportan tanto mayor velocidad como una más fácil reacción”, subraya el experto.
De hecho, una de las claves en ayuntamientos pequeños como los afectados por la gota fría es la ausencia de tecnologías de monitorización y predicción. Estos sistemas se emplean en grandes compañías de todo tipo, desde financieras hasta de transportes, así como en administraciones más grandes. La monitorización recibe y analiza todos los datos de una infraestructura en tiempo real, permitiendo una visión general y advirtiendo de cualquier comportamiento anómalo.
“La monitorización de los datos ya se utiliza hoy en día para prevenir fenómenos meteorológicos extremos, pero debe expandirse más a todos los puntos de España. La medición de los caudales puede verse en tiempo real con tecnologías de este tipo y con el uso de determinados algoritmos se puede prever una situación de riesgo”, indica Lerena. “Hay que gestionar las infraestructuras críticas de manera proactiva y la monitorización lo permite”, explica.
La gran problemática está en las características de los ayuntamientos, donde la falta de inversión o de personal limita mucho sus herramientas. Como explican, este tipo de administraciones suele tener un informático como mucho, lo que hace que tenga una gran carga de trabajo y no se pueda gestionar con tanta precisión una situación de este alcance.
Además, la falta de formación en el uso de tecnologías de gestión de emergencias sigue limitando la capacidad de respuesta de las emergencias en lo que respecta a autoridades locales. “Hay que invertir en capacitación y adoptar herramientas digitales para mejorar la eficiencia operativa. Es necesario y puede generar un entorno mucho más seguro que el actual”, concluye Lerena.