Eneports impulsará el desarrollo de tecnología para digitalizar y fomentar la generación de energía verde en puertos

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Los puertos de Ferrol, Granadilla y Leixões (Oporto) serán pioneros en demostrar cómo la digitalización y la IA permiten a las dársenas convertirse en plataformas de generación de energía verde a precios competitivos y en laboratorios de innovación en energías renovables. En los próximos tres años, se espera la instalación de más de 70 megavatios hasta 2030 en las tres dársenas.

Los puertos de Ferrol, Granadilla y Leixões (Oporto) serán pioneros en demostrar cómo la digitalización y la Inteligencia Artificial (IA) permiten a los puertos convertirse en plataformas de generación de energía verde a precios competitivos y en laboratorios de innovación en energías renovables. Será en el marco de la iniciativa ENEPORTS, un consorcio europeo liderado por el Instituto Tecnológico de Galicia (ITG) y en el que participan el Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER) y la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, que busca mostrar el papel esencial de la digitalización en la descarbonización de los puertos y en el consumo y generación eficiente de energía verde.

El proyecto ENEPORTS, presentado la semana pasada en el puerto de Ferrol, impulsará la creación de tres proyectos piloto, en las dársenas de Ferrol, de Granadilla (Tenerife) y de Leixões (Oporto). Así, en los tres años de duración de esta iniciativa, se diseñarán, se probarán en laboratorio y se pondrán en funcionamiento tres plataformas digitales inteligentes que permitirán gestionar nuevas fuentes de energía renovables y consumo en los tres puertos, lo que permitirá evitar cada año más de 72.250 toneladas de CO2 – equiparable a las emisiones anuales de 16.800 personas -, contribuyendo a la limpieza del aire en las zonas urbanas de Ferrol, sur de Tenerife y Oporto.

En concreto en Ferrol, se espera la instalación en Ferrol de energía eólica terrestre y fotovoltaica con capacidad de producir más de 43 GWh/año, energía necesaria para alimentar más de 4.300 hogares gallegos. Por su parte, en Leixões, además de estas tecnologías se añadirá un prototipo de energía de olas, y la suma de las tres generará más de 20 GWh anuales, equivalentes a alimentar más de 6.100 hogares portugueses. En Granadilla se aprovechará principalmente el recurso de la eólica marina y las olas para producir más de 200 GWh al año, que podrían alimentar a más de 21.700 hogares tinerfeños. En total, los tres puertos prevén la instalación de más de 70 megavatios hasta 2030.

Y es que esta iniciativa también promueve la innovación en nuevas tecnologías renovables, al estudiar la viabilidad de utilizar en puertos dispositivos que combinan en una plataforma la generación de energía fotovoltaica, hidráulica y la generada a través de la tensión de los cabos de amarre. Además, estudia cómo mejorar el control con técnicas de aprendizaje automático. Todo ello les permitirá a los tres puertos alcanzar la neutralidad en carbono alrededor de 2035.

Las autoridades portuarias de Ferrol, Tenerife y Leixões, junto a los centros participantes de la iniciativa, ya han iniciado el estudio de los requisitos administrativos y tecnológicos para crear estos novedosos ecosistemas energéticos en sus áreas, así como la evaluación de sus impactos económicos, sociales, ambientales y tecnológicos.

ENEPORTS cuenta con un presupuesto de más de 2,8 millones de euros, financiados en parte por la convocatoria de Interreg Atlantic Area, y en él participan, además de ITG, la Autoridad Portuaria de Ferrol, de Tenerife, Leixões (Portugal) y Galway (Irlanda); así como la Universidad de Galway, Builders École d’Ingénieurs y el Instituto Tecnológico y de Energías Renovables de Tenerife.

Iniciativas piloto de digitalización y generación de energía verde

Estos pilotos se basan en el desarrollo de plataformas inteligentes para la monitorización y gestión de la energía. Su despliegue en los puertos permitirá demostrar en la práctica la viabilidad de las comunidades energéticas renovables portuarias. Estas plataformas utilizarán algoritmos predictivos, gemelos digitales, “machine learning” y herramientas avanzadas de análisis para controlar eficientemente los flujos energéticos y las reglas de mercado interno de energía, mientras se aseguran la interoperabilidad y la ciberseguridad.

Parte de la novedad del proyecto reside en la creación de metodologías replicables para las autoridades portuarias en lo referente a la involucración de industrias y administraciones; a la evaluación de los impactos económicos, medioambientales, sociales y tecnológicos de los sistemas híbridos; y al aumento de la concienciación sobre los beneficios y la aceptación social de los puertos verdes.

En palabras de Santiago Rodríguez Charlón, director del Área de Energía de ITG, “ITG lidera este consorcio y provee su plataforma inteligente de gestión de la energía desarrollada para comunidades energéticas, que adaptaremos para cada área portuaria, de la mano de nuestros socios y las autoridades portuarias, instalando sistemas específicos de monitorización y control y desarrollando gemelos digitales de los sistemas renovables. Además, apoyaremos a las autoridades portuarias en el diseño de la metodología para el despliegue de laboratorios renovables.”

El ITER desempeñará una amplia gama de tareas en el marco de este proyecto. Desde el análisis de los requisitos de integración de diversas fuentes de energía y los criterios de calidad de potencia en sistemas de autoconsumo, hasta la simulación eléctrica de la red para identificar condiciones de operación estable de energías híbridas combinando fuentes de generación y almacenamiento. Además, se encargará de la validación de tecnologías de hidrógeno para integrarlas en los sistemas de suministro energético en puertos (OPS). En el ámbito de la digitalización, el ITER llevará a cabo, en colaboración con el ITG, la instalación y puesta en marcha de una red de equipos de monitorización, seguido por el desarrollo y despliegue de una plataforma digital inteligente para la supervisión y control energético de infraestructuras. Por último, se encargará de la explotación de datos mediante técnicas de inteligencia artificial para crear una herramienta de toma de decisiones en la operación del sistema energético en entornos portuarios.

Un consorcio europeo que impulsa la descarbonización de los puertos

En un puerto atlántico de tamaño medio, la alimentación de los buques atracados por combustibles fósiles representa entre un 80% y un 95% de las emisiones de toda el área portuaria. Por ello, los puertos se proponen proporcionar a los buques alguna solución de suministro eléctrico durante el atraque, conocido como “cold ironing” u OPS (“onshore power supply”). Estos avances presentan diversos retos tecnológicos para los puertos, que incluyen la integración en la red eléctrica de los nuevos consumos y las nuevas fuentes renovables, y su gestión energética. También presentan oportunidades de crear nuevos servicios, mercados e infraestructuras que puedan beneficiar a sus clientes, a sus concesionarios, y a sus vecinos.

La iniciativa ENEPORTS se ha constituido para estudiar estos retos y oportunidades en los puertos atlánticos, sus potenciales impactos, y proponer metodologías y recomendaciones para abordar esos retos, explotar las oportunidades, y gestionar los impactos; incluyendo la creación de zonas de pruebas para nuevas tecnologías de generación renovable, la instalación de OPS, la formación de mercados interiores de energía, y la gestión de la electricidad con almacenamiento, digitalización e inteligencia artificial.

El efecto duradero más relevante de ENEPORTS será la mejora económica de las regiones en las que se llevarán a cabo los pilotos. Y es que las iniciativas de descarbonización y digitalización en los puertos pueden fomentar el despliegue de nuevos prototipos de energía azul/verde y la instalación de nuevos operadores industriales, industrias electrointensivas y fabricantes de energías renovables, atraídos por la energía verde a precios competitivos, impulsando la innovación, la inversión y la reconversión laboral en las proximidades de las zonas portuarias; al tiempo que se respetan las necesidades medioambientales y sociales, y se reducen las emisiones de CO2 y la contaminación en entornos portuarios en alineación con la normativa europea.