Maneras en las que el sector público puede avanzar hacia ESG

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En respuesta a las cambiantes demandas de los ciudadanos, los líderes gubernamentales están dando cada vez más a los criterios ESG. De hecho, el 70% de las organizaciones del sector público ya están avanzando en sus viajes de sostenibilidad, y el 61% indica que la sostenibilidad es la principal prioridad en los próximos 5 años.

Desde el compromiso con los derechos humanos y la sostenibilidad ambiental, hasta la reducción de los costes operativos a través de una mayor eficiencia energética, pasando por el establecimiento de leyes de privacidad y protección de datos, los gobiernos de todo el mundo están tomando medidas para cumplir con sus objetivos ESG. Aquí hay tres formas en que el gobierno debe considerar ESG para cumplir con las expectativas de los ciudadanos:

1. Supervisar las industrias en sus países

Muchas agencias gubernamentales tienen mandatos para proporcionar supervisión regulatoria de las industrias dentro de su país. Estas agencias gubernamentales tienen la tarea de supervisar las industrias que tienen objetivos climáticos que cumplir. Por ejemplo, bajo el Programa de Informes de Gases de Efecto Invernadero (GHGRP), el gobierno canadiense recolecta emisiones de gases de efecto invernadero de todas las instalaciones que producen más de 10.000 toneladas de emisiones al año.

Programas como el GHGRP tienen grandes requisitos de presentación de informes y requieren que los gobiernos administren cantidades significativas de datos. La digitalización, las herramientas de recopilación automatizada, la inteligencia artificial y el análisis pueden permitir a las agencias del sector público administrar, medir, rastrear y monitorizar estos datos, simplificando el proceso de supervisión de ESG.

2. Evaluación de sus proveedores

El sector público es una industria masiva y los gobiernos de todo el mundo se comprometen con un gran número de contratistas y proveedores para cumplir su misión. Los gobiernos deben garantizar que los proveedores con los que trabajan operen éticamente y sean ambientalmente sostenibles y socialmente responsables.

Cada vez más, las agencias del sector público están pidiendo a los contratistas del gobierno que demuestren que son un proveedor de bajas emisiones. Por ejemplo, el gobierno del Reino Unido publicó un Aviso de Política de Adquisiciones en 2021 que requiere que todos los contratistas del gobierno central del Reino Unido se comprometan a una huella neta cero para 2050. Al evaluar a sus proveedores, los gobiernos pueden garantizar que las empresas con las que trabajan ayuden a contribuir a los objetivos ESG del gobierno, en lugar de contribuir a emitir emisiones adicionales.

Encontrar, seleccionar e incorporar proveedores con prácticas comerciales éticas es un proceso que requiere mucho tiempo. La tecnología puede ser fundamental para establecer y mantener una cadena de suministro ética en el sector público. Una solución de cadena de suministro sostenible conecta y gestiona digitalmente todos los datos de la cadena de suministro en tiempo real con una visibilidad clara del rendimiento, las prácticas y las certificaciones de los socios. Esto permite a las organizaciones garantizar que sus proveedores cumplan con las prácticas comerciales éticas.

3. Predicar con el ejemplo siendo sostenibles

Además de supervisar las industrias y evaluar a los proveedores, los gobiernos deben reducir sus propias emisiones y cumplir con los objetivos ESG de las agencias.

Las agencias gubernamentales tienen una serie de activos que deben tener en cuenta cuando se trata de reducir las emisiones, incluidas las instalaciones propiedad del gobierno y alquiladas, las flotas de vehículos y los centros de datos. También tienen un número significativo de empleados, muchos de los cuales pueden estar viajando a la oficina todos los días. Además, muchas organizaciones gubernamentales siguen dependiendo del papel en sus actividades cotidianas, lo que contribuye al daño ambiental.

Para reducir las emisiones, los gobiernos primero deben poder rastrear y medir la producción, como la cantidad de servicios públicos que usan sus edificios o la cantidad de energía que usan sus centros de datos. La tecnología no solo puede rastrear y medir la producción, sino que también puede ayudar a las agencias y departamentos a identificar una línea de base para medir el progreso, lo que demuestra el progreso hacia los objetivos generales de ESG.

Los centros de datos consumen cantidades significativas de energía. Una encuesta de 2022 muestra que el 60% de los encuestados del gobierno creen que dejarán de poseer centros de datos en los próximos cinco años. Al pasar a la nube, los gobiernos pueden reducir la cantidad de centros de datos que poseen y reducir las emisiones. Otra forma en que los gobiernos pueden reducir el daño ambiental es a través de la digitalización de procesos y formularios en papel, especialmente aquellos que están orientados a los ciudadanos.