Las administraciones públicas incrementan su apuesta por el sector IT

Este crecimiento supone un volumen concursal un 8% superior al registrado en un 2021 que finalizó con 15.680 licitaciones públicas. La situación se acentúa comparando las cifras con 2020, cuando se registraron 13.767 concursos, un 23% menos que el último año. Estos datos ponen en relieve la apuesta realizada desde las instituciones para mantenerse en la vanguardia tecnológica e invertir en sectores claves para la operatividad del sistema.

10.411 millones de euros en licitaciones públicas para el sector IT
En términos económicos esta subida supone una inversión de 10.411 millones de euros para el sector IT; un 14% más que en 2021 (9.117M€) y hasta un 47% más que en 2020 (7.060M€). A este gasto público hay que sumarle ahora la inversión derivada de los fondos europeos Next Generation, que supone una transferencia de 77.340 millones al Estado para la promoción de la innovación y el desarrollo tecnológico europeo.

En las últimas décadas, las tecnologías de la información y las telecomunicaciones se han situado como elementos imprescindibles para la administración pública y ya están presentes en prácticamente todos los sectores. Desde la atención a la ciudadanía hasta la gestión y el mantenimiento de las infraestructuras críticas dependen en gran medida del correcto funcionamiento de la industria tecnológica nacional. La gestión de datos, la monitorización de estos y el control de toda la información IT para lograr la máxima eficiencia es algo presente en gran parte de las instituciones públicas.

A pesar de las crecientes cifras económicas provenientes de las ofertas públicas, también se ha incrementado el volumen de licitaciones que se quedan desiertas al no encontrar empresas dispuestas a realizar la referida obra o servicio. Por este motivo, millones de euros de las arcas públicas se quedan estancados cada año y, desde 2020, esta cifra se ha disparado un 559%. Para ello, la Administración debe mejorar su estrategia de publicitar las ofertas que saca a concurso y utilizar todas las herramientas que tengan a su alcance para atraer a compañías privadas.

Esta tarea no es sencilla, ya que el proceso de adjudicación implica gestionar una gran cantidad de información -en muchas ocasiones cambiante- que puede provocar que la relación se diluya.

Además, por ley, las instituciones tienen que abarcar cualquier “política de mejora de la competitividad” que atienda de forma prioritaria a las pymes. Para lograr cumplir con todos estos detalles, cada vez son más las instituciones públicas que se apoyan en plataformas de inteligencia comercial que permiten realizar un seguimiento de la evolución de cada proceso y captar con una mayor eficacia a las empresas. DoubleTrade ayuda a los clientes a detectar la información valiosa.

Entre todas las categorías que engloba el mercado IT reclamadas por la administración destaca la prestación de servicios informáticos. Lejos quedan los inventarios en libros contables hechos a lápiz y bolígrafo o la obligatoria necesidad de presencialidad para el tratamiento documental con las instituciones públicas; ahora prácticamente todo se puede hacer desde el ordenador e incluso cada vez más cosas se deben hacer sí o sí online. Para ello es imprescindible que los servicios informáticos públicos funcionen y los organismos invierten cada vez más en mantenerse actualizados. Lo confirman los datos, pues en 2022 se sacaron a licitación 5.230 concursos públicos por valor de 2.819 millones de euros para dotar al sector público de los servicios informáticos necesarios para afrontar los desafíos del siglo XXI.

Además de estas partidas destinadas a los servicios informáticos, en 2022 el sector público español licitó 3.700 concursos al suministro de equipos informáticos; 4.380 a servicios de consultaría, sistemas de software e internet; 1.260 a la telefonía y las comunicaciones; o hasta 2.200 concursos para equipos de radio, tv y comunicaciones. En total cerca de más de 10.000 millones de euros destinados a garantizar estos servicios y equipos.

Como ejemplo de la inversión pública en el sector, destacan los cerca de 95 millones euros que la Junta de Andalucía ha destinado el año pasado al suministro de aulas digitales en centros docentes no universitarios; los 83 millones de euros que Ministerio de Interior ha destinado a la prestación de servicios de soporte y asistencia técnica para el correcto funcionamiento del centro de tramitación de denuncias automatizadas; o los 74 millones de euros que la Generalitat de Cataluña ha invertido en la puesta en marcha de paneles digitales interactivos en centros educativos.

Sin embargo, la industria de las telecomunicaciones no se libra de un fenómeno que en 2022 creció exponencialmente en España: las licitaciones desiertas. Tan solo para los servicios informáticos, más de 200 concursos públicos quedaron paralizados al no encontrar a ninguna empresa que lo ejecutase destacando licitaciones desiertas como la contratación de estos servicios por el gobierno vasco, que contaba con uno de presupuestos más elevados que se han quedado estancados, de 3.781.864 euros.

Evolución de los requisitos de las nuevas ciudades
Relacionado con este reinado de la información, una de las industrias que más han crecido en los dos últimos años en nuestro país es la de los centros de datos. Esta revolución de la economía digital es tal que España no tardará en convertirse en el mayor 'hub' de datos del sur de Europa con la apertura de más de una docena de nuevos centros en nuestro territorio.

Entre los nuevos centros de datos destacan las nuevas instalaciones de Amazon Web Services (AWS) para el negocio Cloud en Aragón y, sobre todo, el centro de datos de Meta en Talavera de la Reina (Toledo), que comenzará a construirse en 2023. Esta pequeña ciudad manchega, que en los últimos meses también ha comenzado a albergar centros de proceso de dato como el del Grupo Aire, encabeza la estrategia de innovación digital urbana y ha sido escogida como sede mundial de GAIA-X, la asociación europea que promueve el impulso a la innovación digital.

En un mundo de masificada y constante información, saber obtenerla y gestionarla supone un punto de inflexión tanto para la dinámica empresarial como pública. Y en el ámbito de las licitaciones, con un sector IT en pleno desarrollo, tener dominada la información es trascendental para dar un salto cualitativo.